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¿Te “enca” la ecuación de frecuencia cardíaca?

Si sientes que estás al borde del agotamiento físico, pero no estás obteniendo ningún Puntos Splat, o si apenas respiras con dificultad y acumulas 30+ Puntos Splat en cada clase, puede ser momento de ajustar tus zonas de frecuencia cardíaca.
¿Te “enca” la ecuación de frecuencia cardíaca?

Orangetheory Fitness tiene una nueva forma de asegurarse de que tu frecuencia cardíaca esté funcionando mejor que nunca para ti.

“¡Vaya!” puedes decir, “¡Pensé que ya estaba funcionando bien para mí!”

Lo está. Pero tu frecuencia cardíaca puede hacer mucho más. Ya sea que hayas participado en una clase o en 100 clases, sabes que Orangetheory siempre se esfuerza por encontrar maneras de hacerte más saludable y en forma de la manera más simple y rápida. Y, como miembro de Orangetheory, también sabes que las zonas de frecuencia cardíaca proporcionan la mejor manera de medir la intensidad cardíaca y así mejorar la condición física — la misión principal de OTF desde el primer día.

La nueva forma de Orangetheory de calcular la frecuencia cardíaca, que se lanzó en mayo de 2019, es aún más efectiva que lo que estás haciendo ahora. Es aún más personalizada, además, escaneando datos de 20 de tus entrenamientos anteriores para estimar nuevas zonas para ti — no para tu mejor amigo, no para tu competencia más dura, no para la persona que está a tu lado en la clase. Las zonas establecidas son solo tuyas.

Este nuevo cálculo basado en tus datos de entrenamiento pasados mejorará tu juego. Además, aumentará esas calorías que quemas incluso después de dejar el estudio y entrar en tu día.

Un poco de contexto: Las zonas de frecuencia cardíaca fueron establecidas por el científico finlandés Dr. M.J. Karvonen en 1957. La fórmula tradicional para calcular la FC máxima — 220 menos tu edad — se estableció en 1970. Estas ecuaciones basadas en la edad han evolucionado con el tiempo para ser más precisas, pero en realidad no son una fórmula única para todos. ¿Cómo podrían serlo? Cada uno de nosotros es diferente, y cada uno de nuestros corazones late a su propia velocidad y eficiencia.

Aquí en Orangetheory, cada minuto en las zonas de frecuencia cardíaca roja o naranja, donde el corazón está trabajando a su máximo nivel, equivale a un Punto Splat. El objetivo de cada entrenamiento es al menos una docena de tales puntos. Pero si sientes que estás trabajando lo más duro posible y incluso los 12 puntos parecen esquivos — o si acumulas fácilmente 30 y todavía puedes respirar — la fórmula de frecuencia cardíaca probada y verdadera puede no serlo para ti.

Reconocer esto hace que nuestros corazones latan más rápido de alegría ante la mera idea de poder utilizar esta información para hacer que los entrenamientos de nuestros miembros sean aún más efectivos. Y aunque nuestro método actualizado de cálculo es nuevo, las semillas para reconfigurar los números fueron sembradas por un número muy pequeño de escépticos hace décadas. Para Joel French, que trabajaba como Director Senior de Investigación, Fitness y Bienestar de OTF, en el momento en que se lanzó la nueva forma de calcular tu frecuencia cardíaca, se sembraron por primera vez mientras tomaba clases de aeróbicos a los 19 años.

“Nos esforzábamos, luego los instructores se detenían y poníamos nuestros dedos en nuestra muñeca o cuello durante 15 segundos y mirábamos una gráfica en la pared para ver dónde estaban nuestras frecuencias cardíacas,” dice Joel.

“Pasé mis primeros años siendo criticado porque mi frecuencia cardíaca era tan baja por naturaleza. El instructor me reprendía y me daba un peso más pesado. Después de un año, pensé: ‘¡He terminado con el ejercicio en grupo!’”

Afortunadamente, no estaba completamente acabado. No por un largo trecho. Y he aquí que, muchos años después, más de un millón de miembros de OTF se benefician de este “aprendiz obstinado” autodenominado. Porque aunque Joel puede haber dejado las clases de aeróbicos, no dejó la creencia de que debe haber una mejor manera.

“Esta ha sido una cruzada mía durante 25 años,” dice. “Si damos a las personas las frecuencias cardíacas incorrectas, se desaniman y no quieren hacer ejercicio.”

Para bien o para mal, nos hemos convertido en una nación que juzga los resultados por los números. Lo que significa que, sin importar cuán enérgico se sienta una rutina de ejercicios o cuán mejor se ajusten nuestras prendas o cuán bajos sean nuestros niveles de presión arterial y colesterol, si ciertos números dicen lo contrario, nos rendimos.

“En lugar de cuestionar la tecnología,” dice Joel, “la gente piensa que esto es solo otra cosa que no funciona para su cuerpo, y renuncian.”

Pero ahora, con los nuevos cálculos, especialmente no hay razón para cuestionar la tecnología.

“Esta ecuación será adecuada para casi todos,” dice Joel. “Estamos midiendo la verdadera frecuencia cardíaca de las personas. Estamos recopilando datos cuando entrenan, observándolos en los últimos 20 entrenamientos y diciendo: ‘Aquí está lo que pensamos que es tu frecuencia cardíaca máxima.’”

Podrías averiguar esa información por tu cuenta haciéndote la prueba en un hospital o universidad, pero te costará $300 o más. En OTF, no te costará un centavo. Y los beneficios de conocer tus propias zonas de frecuencia cardíaca no pueden medirse.

“Las zonas importan,” enfatiza Joel. “Entrenar a la intensidad adecuada equivale a mejores resultados, más rápido. La frecuencia cardíaca es la mejor medida de intensidad durante un entrenamiento.”

En cuanto a los Puntos Splat, dice que una persona que actualmente consigue 50 en un entrenamiento podría sentirse satisfecha con ese número. “Pero si tuvieras las zonas correctas, habrías sido motivado a esforzarte un poco más,” dice Joel. “Podrías ver 30 puntos, pero el conteo de calorías sería mejor de lo que era con 50.”

¿Intrigado? Aquí te explicamos cómo darle una prueba:

Primero, asegúrate de haber completado 20 entrenamientos.

Luego, pide a un entrenador o asociado de ventas que ajuste tus zonas.

A continuación, prueba las nuevas zonas. Ve qué opinas, cómo te sientes. Pruébalas varias veces.

¿No te funcionan? No te preocupes. Pide que te cambien de nuevo.

“Cuanto más entrenes con nosotros y más te esfuerces, más precisas serán tus zonas, ¡así que mantente firme!” Joel dice. “Si obtenemos bien las zonas de entrenamiento de los miembros, se esforzarán tanto como deberían y se recuperarán como deberían, obteniendo más beneficios: más salud, más vida, más quema de calorías — y llegarán más rápido a donde quieren estar.”